POR UN CASCO HISTÓRICO SANO Y SOSTENIBLE




Todos hemos venido contemplando cómo el centro de nuestra ciudad se apagaba, esto es una realidad. El principal problema de nuestro centro no era la falta de actividad, de gente o de recursos. Tenemos un centro plagado de monumentos, quizás no los más espectaculares, pero seguro que son más o menos interesantes para el ojo desconocido. El espacio urbano, aun habiendo perdido sus orígenes de callejones y plazuelas, se ha ido ordenando prematuramente, sin visión de continuidad a largo plazo, dotándolo de zonas peatonales y espacios abiertos por las que en algunos momentos da gusto pasear. El número de edificios públicos que se han ido concentrando en su maraña, hace que por sus calles deambulemos muchos vecinos y vecinas haciendo recados, pequeñas compras, gestiones administrativas, y cuando se puede, incluso nos permitimos visitar las muchas terrazas que de repente surgen como brotes verdes.

Pero desafortunadamente los gerentes de nuestra ciudad no han dado con la tecla para poder potenciar estas virtudes a lo largo de tantos años, indiferentemente del color de sus ideas o intenciones. Más allá de ferias y mercados discontinuos (algunos con poco sentido y preparación), las subvenciones indiscriminadas a empresarios (con el apoyo incondicional a algunos locales muy concretos), y numerosos anuncios u promesas vacías de contenido, el Ayuntamiento no hace demasiado por la vida de nuestro centro. Y todo esto es, otra realidad, más bien la cruda realidad.

La gran cantidad de solares que lo pueblan son el ejemplo más palpable de la desatención que sufre nuestro entrono más visible a todos los que nos visitan, y nuestros dirigentes no saben ya qué hacer ante el continuo languidecimiento del centro histórico, por más obras y decoraciones que se les ocurre (todas ellas sin coordinación ni miramientos de futuro). Numerosos palacios en venta o vacíos, edificios públicos dejándose morir como el Ateneo o el edificio negro del cívico, solares con vegetación selvática y acumulación de desechos y escombros, andamios raídos y oxidados que forman parte del paisaje desde hace ya demasiados años... la viva imagen de la desatención y la inmovilidad, de la desidia y la prepotencia de no saber hacer autocrítica de las gestiones mal programadas.

Más de un Ciudadan@ apuesta por un centro sano y sostenible. Un centro vivo, dinámico, solidario con sus habitantes y usuarios, dinamizado y en constante movimiento. Todo ello equilibrado con eficiencia en la gestión de su limpieza, de su mantenimiento, de sus espacios verdes y lúdicos, y organizado para su disfrute y para que también sus ciudadanos puedan descansar cuando lo deseen.

Desde el Ayuntamiento venimos trabajamos y apoyando algunas propuestas concretas que ya fueron presentadas y/o que seguiremos haciendo en los próximos meses:

- Mejorar la movilidad peatonal y rodada, apostando por el fomento del uso de la bicicleta y transportes públicos de pequeño tamaño sanos y amables para con sus habitantes.

- Reavivar la actividad de espacios como el mercado de abastos, al estilo de otras muchas ciudades de España, pero con nuestra idiosincrasia, sin imitaciones ni copias que aquí no funcionarían.

- Potenciar la difusión y divulgación de más actos culturales y de ocio en el casco histórico (sin limitar estas actividades sólo a la Plaza Mayor, con una visión más desfocalizada).

- Apoyar a las instituciones, organizaciones, asociaciones y comerciantes en lugar de poner trabas y limitar sus posibilidades.

- Liderar y fomentar una Guadalajara viva, sana y culta, con programaciones anuales debidamente planificadas y difundidas de ciclos y festivales que puedan dar esa vida que a día de hoy le falta a la ciudad, y especialmente a su centro.

- Mejorar los horarios de apertura de atractivos turísticos y promocionar la ciudad en nuestros alrededores.


Respecto del elevado número de solares existente, exigiremos al Ayuntamiento que haga cumplir con la normativa vigente, y con las exigencias de construcción de edificios en los solares en menos de 6 meses que impusieron nuestros gobernantes. No es hora de hacer la vista gorda y permitir supuestos usos que no son compatibles con las propiedades sobre las que se pretenden impone. Los solares deben construirse y habitarse, para que entre más vecinos, paguemos todos lo mismo y podamos conseguir mejores prestaciones y servicios de las empresas adjudicatarias de la limpieza, transporte urbano, mantenimiento, iluminación, agua, etc. Si esos solares no se construyen y se ocupan con nuevos habitantes llenos de vida, el resto de vecinos seguiremos asumiendo los gastos que a día de hoy no asumen los propietarios de los solares (menos IBI, tasas de basuras y demás que los solares no pagan).

Sería nuestra intención promover esos solares desde el propio consistorio a través de los instrumentos que permite la Ley para edificar y distribuir viviendas de protección pública, por ejemplo, pero somos conscientes de la situación económica del Ayuntamiento.

También sería un verdadero placer facilitar los espacios públicos vacíos, esos edificios abandonados, a empresas de economía social, a colectivos vecinales necesitados, para que puedan acceder a la dinamización de la actividad de esa gente que habita diariamente el centro urbano, además de permitir que se utilicen los solares de titularidad pública para usos sociales, sostenibles y de ocio: parques fugaces, espacios de divulgación cultural abiertos, huertos urbanos, y lugares de ocio y esparcimiento para vecinos y vecinas.

Todo no se puede emprender de repente, pero ese superávit que es de todos nosotros los que contribuimos, de todas y cada una de las vecinas de Guadalajara, podríamos ir invirtiéndolo en levantar poco a poco, desde el sentido común, esa Guadalajara que todos querremos para un futuro no muy lejano.


2 comentarios:

  1. Exactamente lo que ha hecho el Obispo en la Colegiata de Pastrana: convertirla en una taquilla y para eso promovió la demolición y ampliación, expresamente prohibidas por la ley en un edificio protegido.

    Eso sí, con la benemérita ayuda de las Hermanas de la Caridad Pro Ecclesia, Anita Guarinos y Lolita Cospedad. -700.000 euros de dinero público en el empeño.

    Y los chupópteros capitalianos mirando a otro sitio, no sea que les quiten dos euros de subvenciones.

    ResponderEliminar
  2. El otro día estando de compras por Guadalajara, un turista me preguntó que es lo que se podía ver en esta ciudad. Apunto estuve de mandarlo a ver los solares, andamios y espumas amarillas. Al final fui buena persona y le mandé a ver el Infantado, lo que no se es si fue con los ojos vendados hasta allí o al final también vio el desastre de la calle mayor.

    ResponderEliminar